El Jackpot de $1.725 millones de Powerball se convierte en el 2º más grande de la historia

¡La fiebre de Powerball no parece tener fin! En el sorteo de ayer, lunes 9 de octubre, tampoco hubo ningún boleto que lograra acertar la combinación ganadora de números (16, 34, 46, 55, 67 y el Powerball 14), por lo que nuevamente el jackpot se acumuló y escaló hasta la increíble suma de 1.725 millones de dólares.

Con esta cifra, se convierte en el segundo premio de lotería más grande del mundo, dejando atrás al jackpot de $1.586 millones de Powerball de enero de 2016, y solamente superado por el actual jackpot récord de $2.040 millones también de Powerball, sorteados en noviembre de 2022. ¿Será que estaremos próximos a un nuevo récord?

Si nadie logra acertar los números del próximo sorteo, que se realizará el miércoles 11 a las 22:59h de EE.UU., no es osado pensar que pueda lograrse un nuevo récord mundial. Con la cantidad de personas jugando a Powerball alrededor de todo el mundo, las ventas de los últimos sorteos se han disparado exponencialmente por la ilusión de poder llevarse el mega-jackpot.

En el sorteo de ayer, 4 boletos se quedaron a las puertas del primer premio, al acertar los 5 números de la combinación ganadora, pero no el Powerball. Lamentablemente, deberán conformarse con el segundo premio de 1 millón de dólares para cada uno.

El jackpot de Powerball tras impuestos: ¿cuánto se gana verdaderamente del premio?

Aunque el jugoso jackpot anunciado para el sorteo del miércoles sea de 1.725 millones de dólares, lo cierto es que, en el caso de las loterías de EE.UU., no siempre el premio obtenido se corresponde con la cifra anunciada. La razón, es que los jackpots se anuncian sin descontar las tasas de impuestos, por lo que la cifra real que obtiene el jugador siempre es mucho menor.

Sin embargo, no solo los impuestos entran en la ecuación para complejizar el pago de premios. Para empezar, según el estado donde se compre el boleto, pueden aplicar tasas estatales además de las federales. Y, por si fuera poco, en EE.UU., los ganadores del jackpot tienen la opción de cobrar sus premios de dos formas diferentes: en anualidades, o de un solo pago. Claro que cada una de estas formas tiene diferentes implicaciones en las deducciones del premio.

Vayamos paso a paso para entender la complejidad del cobro de los premios. Para comenzar, por regla general todos los jackpots están suscritos a un 37% de pago de impuestos federales. Y, además, algunos estados aplican impuestos estatales adicionales, que varían de estado a estado. Salvo el caso de California, Florida, New Hampshire, South Dakota, Tennessee, Texas, Washington (salvo DC) y Wyoming, todo el resto de estados aplican tasas estatales que pueden ir desde el 2,9% hasta el 10,9% según cada caso.

Pero, además, los ganadores que elijan cobrar su premio con la opción de un solo pago, están sujetos a una retención de casi el 55% del premio antes de impuestos, por gastos de gestión de la lotería. Esta retención no aplica en el caso del cobro en anualidades, aunque es una opción solo disponible para los jugadores dentro de EE.UU. (no aplica para personas que jueguen desde otros países) y, además, es la opción menos escogida, ya que los jugadores prefieren sacrificar una parte del premio, pero garantizarse un pago inmediato, en vez de complicarse con varios pagos y la pérdida consecuente del valor real del premio en el tiempo que eso implica.

Por lo tanto, en el caso de que un jugador escogiera la opción de pagos en anualidades, recibiría de parte de la lotería los 1.725 millones de dólares íntegros pero repartidos en pagas anuales, a lo que luego debería descontar los impuestos correspondientes según cada caso. Mientras que, si un jugador escogiera recibir el premio en un solo pago, recibiría de la lotería un pago de aproximadamente 778 millones de dólares, tras lo cual debería descontar los impuestos correspondientes según las condiciones de su boleto o apuesta.